Te necesito.
Sinopsis: Esta es la historia de cómo me enamoré de ella. Esta también es la historia de cómo la perdí.
Trigger warnings: Pérdida de un ser querido y acoso social (?
Este relato participa en el Reto anual: 12 meses 12 Relatos 2020 organizado por “De aquí y de allá by TanitBenNajash”.
Noelia Martín Luna beteó (corrigió) esta historia. Descarguen sus cositas aquí.
Primera escena: El pasado.
Nuestro comienzo fue de lo más cliché.
Solía leer, todavía lo hago. Cuando leía a esas chicas que comenzaban a salir con el chico inalcanzable —usualmente el más popular del colegio (hola, existimos les personas geeks inalcanzables, gracias)— por un trabajo en grupo solía reírme. Era el tropo que más leía y más criticaba.
Así comencé a conocer a Jenifer más allá de lo que dejaba ver.
Jenifer era, ahora que lo pienso, el perfecto prototipo de chica popular. Bonita, amiga de todes, siempre la capitana del equipo de fútbol, hija de grandes hechiceres.
Me gusta pensar que yo no era un cliché. Pero sí lo era. Era la que quería que la entendieran, pero alejaba a todes; la que soñaba con príncipes y princesas encantades, pero no se atrevía a cumplir esos sueños; la que vestía de negro porque quería fundirse con las sombras de las que venía.
A que no adivinan qué pasó.
El profesor Rattia me juntó con Jenifer. Sé por qué lo hizo. Lo hizo porque sabía que prefería hacer las cosas sola, porque no estaría cómoda. Lo hizo para joderme, para que viera lo perfecta que era Jenifer y lo horrible que era yo.
Segunda escena: La amistad.
Soy detallista; por supuesto que me di cuenta de los momentos en los que me hice amiga de Jenifer.
El primero fue cuando me sonrió. ¿Sabes? Todes sabemos cuándo recibimos una sonrisa sincera. Jenifer se acercó y cuadró conmigo el día para hacer el trabajo y me sonrió. Ella era increíblemente perceptiva; me propuso hacer el trabajo en la biblioteca del colegio. Sabía que prefería no ir a la casa de ninguna de las dos. Ese fue el segundo. Le importaba que me sintiera cómoda y no necesitaba decirle cómo hacerlo. Tranquiles, ahora sé que debo hablar sobre lo que siento porque las personas no son adivines.
El tercero fue cuando entregamos el trabajo. Jenifer me invitó a comer una hamburguesa. Estaba tan cansada de estar ahogada en mí misma que acepté.
Tuve un ataque de ansiedad. No podía salir. No podía. Mamá fue la que le dijo a Jenifer que no iba a ir con ella.
¿Saben qué hizo? Me llevó una hamburguesa al colegio al día siguiente.
Ah, y no te digo lo mejor. A Jenifer nunca le importó que viniese de la oscuridad. Solía decir que lo importante no era de dónde venía sino hacia donde iba.
Tercera escena: lo que fuimos.
Fuimos a nuestra Ceremonia de Elección juntas. Jenifer me había maquillado, planchado el cabello y prestado un par de sus tacones. Llevaba un vestido negro regalo de mamá. Jenifer iba de amarillo. ¿Cómo hacía para que el color le quedara tan bien? No lo sé, pero su piel morena resaltaba maravillosamente.
Mentiría si dijera que no estaba nerviosa. Llevaba toda mi vida escuchando a les demás hablar de mi futuro para la oscuridad. Hace años había sido eliminada legalmente la enemistad entre les brujes y les hechiceres, pero no en las personas. Sí, teníamos trabajos juntes; sí, nuestros gobiernos se habían mezclado; sí, podíamos relacionarnos entre nosotres. No, no dejaban de vernos a les brujes como "el mal"; no, no dejaban de susurrar a nuestras espaldas; no, no dejaban de alejar a sus niñes cuando nos acercábamos.
Y esa noche iba a saber a qué bando pertenecía. No le solté la mano a Jenifer hasta que fue llamada.
Una Hechicera. Jenifer en su discurso eligió ser Guardiana. Ella quería proteger a todo el mundo.
Las lágrimas salieron y tuve que secármelas cuando fui llamada.
¿Saben qué símbolo brilló cuando entré en el agua?
El símbolo de les hechiceres.
Hechicera.
Yo.
Cuarta escena: lo que llegamos a ser.
Jenifer iba en su tercer año en la Academia de Guardianes, yo estaba comenzando las prácticas como médica. Ambas nos fuimos de Calabozo. Yo porque no soportaba ver cómo mis padres se enfrentaban a esa suciedad que se presentaba como sociedad porque su hija había salido hechicera. Jenifer porque siempre había soñado con vivir en Maracay.
Esa noche estrenaban Aladdín en Las Américas y decidimos ir a verla.
Jenifer cantó todas las canciones de la película. Yo me comí todo el pote de cotufas.
Salimos a Churromanía para finalizar la noche. Yo había tenido una semana fatal en el hospital; había tenido que ir tres veces en la semana a llorar al cuarto de los residentes. No soportaba ver a les niñes desnutrides, a les adolescentes tragándose las lágrimas porque su vida se les acababa, a les padres que le hablaban a sus hijes en coma. En ese momento estaba viendo a una psicóloga y tenía las herramientas para enfrentarme a mí misma cuando perdía el control. Pero a veces… solo era demasiado.
Jenifer me haló de la mano.
"¿Serías mi novia, Luismar Andreina?".
Yo estaba manchada de arequipe. Ella tenía un collar extendido hacia mí.
Le dije que sí.
Quinta escena: ya no está.
Estaba de guardia cuando las ambulancias comenzaron a llegar.
Un ataque a una de las bases de les Guardianes. No pude enloquecer y correr a buscarte; tenía que entrar a cirugía. Lloré mientras me quitaba el anillo de compromiso para lavarme las manos.
Ocho horas.
Salí del quirófano y no me quité el traje quirúrgico. Estaba manchada de sangre. No me importó. Corrí llevándome por delante a todo el mundo y le arranqué de las manos el historial de entradas al enfermero en recepción.
Estabas en quinto piso. En UCI.
Volví a correr. Escuché las exclamaciones horrorizadas del guardia de UCI cuando entré llena de sangre.
No dejé que nadie me detuviera.
Una vía salía de tu brazo izquierdo y se dividía en millones de tubos conectados a bolsas de pociones y sangre.
Te estaban dando sangre.
Cuando a une hechicere le suministraban sangre era porque ya no había nada más que hacer. Era una forma de mantenerles vives mientras contactaban con el familiar más cercano.
Ahora estoy escribiendo esto mientras abajo todos lloran sobre tu urna.
No puedo salir.
¿Cómo se supone que cumpla todos nuestros sueños si no estás tú?
Te necesito, Jenifer Martínez, ¿acaso no lo sabías?
...
¡Espero les haya gustado —aunquesea un poquito—!
Besos,
Carly.
¡Espero les haya gustado —aunquesea un poquito—!
Besos,
Carly.
Holi, vengo a decirte que ya te leí y repetirte con la confianza que tenemos que ; no mames, por piedad no vuelvas a usar esa fuente y menos en ese tamaño. No se ve ni un carajo y yo estoy muy ciega. TT_____TT
ResponderBorrarAhora, a la historia : te falto espacio. Sin dudas, se nota que intentaste desarrollar la historia entera a base de escenas, esta técnica funciona pero no siempre es la más adecuada en especial cuando tenemos espacio muy limitado como es el caso, tal vez si te hubieses enfocado en una sola y a partir de ella narrar entre líneas el resto podría haber funcionado un poco mejor. Pero aún así no es un mal intento, solo hay que recordar que el ritmo de una historia importa casi tanto como su prosa y a nadie le gusta que la vayan carrereando.
La trama es como tu sabes, cliché de manual. No es algo que me moleste o me preocupe, pero no es algo que no hayamos leído antes y por lo mismo si te recomendaria si vuelves a usar la formula trabajar la forma de presentarla para que no se lea como "una más" y se pueda empatizar con la narradora.
La verdad es que tanto aquí como en la participación con el fic, se nota tu desarrollo a comparación de tus relatos del reto del 2018. Esperemos para diciembre mejores aun más. :D
¡Tanit! I swear never back to use that kind of letter or size. x'D
ResponderBorrarGracias por las recomendaciones. Tengo que aceptar que en los relatos no puedo contar una historia completa a base de escenas porque las palabras no dan; voy a comenzar a trabajar así. En torno a una escena o un momento en concreto. Veremos cómo me va en febrero. x'D
Ojalá que para diciembre no sea tan mala (?
¡Besos!
Holi, soy muy fan de relaciones entre mujeres pero este lo sentí super rápido y no me dio tiempo de encariñarme de nadie :( haha
ResponderBorrarPero obviamente es un plot de cliché bien chido que amo y que me gustaría leer si lo llegas a desarrollar más :3